Se trata de Mariano Dabos, acusado de integrar una importante organización dedicada al narcotráfico en Mar del Plata, que fue desbaratada en diciembre de 2015.
Efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones lograron detener hoy en la localidad de Villa Gesell a uno de los prófugos más buscados por la Justicia de Mar del Plata.
Se trata de Mariano Dabos, acusado de integrar una banda de narcotraficantes que fue desbaratada en diciembre de 2015 a través de lo que se conoció como “Operativo Milonga”.
Dabos era el único miembro de esa organización que aún permanecía prófugo.
Según pudo saber LA CAPITAL, el hombre, de unos 36 años, fue apresado tras de un minucioso trabajo de investigación realizado por la DDI que permitió ubicarlo en Villa Gesell, donde aparentemente, se encontraba con la intención de asistir como espectador a la competencia “Enduro del Verano” que se llevará a cabo durante este fin de semana.
Según testigos, la detención de produjo en la vía pública sin que se registraran mayores inconvenientes ya que al verse rodeado por policías Dabos decidió colocar sus manos sobre la cabeza y arrodillarse en el suelo por voluntad propia.
El hombre figuraba en la lista de los prófugos más buscados por la Justicia marplatense por su relación con una banda de narcotraficantes que cayó el diciembre de 2015, cuando fueron apresadas 12 personas, entre ellas uno de sus hermanos, de 28 años y hasta su madre, de 53.
Meses más tarde, la policía logró dar con el paradero de quien sería uno de los cabecillas: Sergio “Gaita” Alonso, quien fue detenido en mayo en la zona de Alberti y Catamarca.
Dabos era el último miembro de la organización cuyo paradero se desconocía. Su detención se produjo en el marco de una investigación que se encuentra a cargo del fiscal Leandro Favaro.
La mayoría de los miembros de la organización fueron apresados en el marco del se produjeron”Operativo Milonga”, bautizado así por el resultado de las escuchas telefónicas que en su momento había ordenado la Justicia. “¿Tenés milonga?” era la frase utilizada por los clientes para consultar sobre la disponibilidad de drogas.
Las investigaciones permitieron establecer que en realidad, los imputados no constituían una única banda, sino que operaban en al menos cuatro células individuales conectadas entre sí por compartir proveedores y clientes.